Las anémonas de mar se encuentran entre los animales más hermosos del océano, con sus colores brillantes y sus movimientos. Estos animales invertebrados forman un orden perteneciente al filo de los cnidarios (compuesto por medusas, hidroideos o gorgonias, entre otros) científicamente conocido como Actiniaria.
Características de las anémonas de mar
Estos animales son increíblemente diversos, ya que existen en mucha variedad de tamaños, formas y colores. Con más de 1.000 especies y muchas adaptaciones a la vida en diferentes hábitats.
- Las anémonas de mar más comunes son las grandes anémonas tubulares, de brillantes colores, que pueden alcanzar hasta 60 centímetros (2 pies) de longitud y se encuentran en aguas poco profundas de todo el mundo.
- Estos son algunos de los organismos marinos más vívidos y fácilmente reconocibles, con colores que van desde marrones oscuros a azules eléctricos, naranjas fluorescentes y rosas vibrantes.
- Sin embargo, la mayoría de las especies de anémonas son relativamente pequeñas y muchas presentan una gama de tonos apagados, desde azules sutiles a rojos óxido, y algunas no tienen ningún color.
Tipos de anémonas de mar
La forma más obvia y clásica de clasificar las anémonas de mar es por su tamaño, siendo las anémonas tubulares las más conocidas. Además de esto, existen algunas categorías en las que se pueden dividir las anémonas de mar.
- Un tipo es el de las anémonas de un solo tentáculo, como la popular anémona payaso.
- Se encuentran en aguas poco profundas y su único tentáculo sirve para atrapar a presas que pasan por allí.
- También se adhieren al suelo u otras superficies con un hilo fino y pegajoso.
- El otro tipo es el de las anémonas de varios tentáculos, que se encuentran en aguas más profundas y tienen varios tentáculos dispuestos en círculo alrededor de la boca.
- Estas anémonas pueden alcanzar un diámetro de hasta 7,6 metros (25 pies) y utilizan sus tentáculos para atrapar gambas y otras criaturas pequeñas.
Adaptaciones de las anémonas de mar
Las anémonas de mar son increíblemente adaptables a su entorno, por lo que se pueden encontrar en una gran variedad de hábitats de todo el mundo. Una de las adaptaciones más asombrosas de estos seres es su capacidad para cambiar de color. Según su entorno, pueden ser negras, rojas, blancas, e incluso azules o verdes. Esto les ayuda a confundirse mejor con su entorno, lo que dificulta aún más que los depredadores las encuentren.
Además, los tentáculos urticantes de las anémonas se utilizan para capturar presas y proteger al animal de los depredadores. Estas células urticantes, o cnidarios, pueden utilizarse para aturdir o inutilizar a sus presas y dar tiempo a la anémona para que cambie de posición o escape.
Hábitos alimenticios de las anémonas de mar
Las anémonas de mar se alimentan principalmente de pequeños crustáceos, como gambas y cangrejos, y de peces pequeños. Utilizan sus tentáculos para capturar a sus presas y después atraerlas hacia su boca. También pueden atrapar a sus presas por los pelos de los tentáculos o liberando toxinas, que pican y matan a sus víctimas.
Estos animales pueden vivir en distintos hábitats, desde zonas costeras poco profundas hasta aguas más profundas, e incluso algunas especies son capaces de sobrevivir en tierra. Incluso algunas anémonas han adaptado para vivir en agua dulce, y se encuentran en ríos y lagos.
Reproducción de las anémonas de mar
Las anémonas de mar se reproducen tanto sexualmente como asexualmente. La reproducción asexual es aquella en la que la anémona se divide en dos, formando dos nuevos clones de sí misma. Sin embargo, la mayoría de las especies de anémonas de mar se reproducen sexualmente, y ambos individuos liberan espermatozoides y óvulos en el agua. Cuando los espermatozoides y los óvulos se encuentran, forman larvas, que se adhieren al cuerpo de la anémona y se desarrollan hasta convertirse en nuevos individuos.