Si alguna vez te has encontrado con el término «mamba negra» y te has preguntado qué significa o qué tan peligrosa es, estás en el lugar correcto. En este artículo, hablaremos del mundo de esta serpiente venenosa. ¡Vamos a explorar!
¿Qué es una mamba negra?
Conocida científicamente como Dendroaspis polylepis, es una especie de serpiente altamente venenosa que se encuentra en diversas partes de África. Alcanzando longitudes de hasta 4,3 metros (14 pies), esta ágil y veloz criatura se ha ganado una reputación como una de las serpientes más mortales del planeta.
Características físicas de la mamba negra
- Esta serpiente posee un cuerpo esbelto y delgado, que es predominantemente de color oliva a marrón.
- Su nombre común, mamba negra, se debe a la línea negra tinta que se encuentra en el interior de su boca.
- Esta característica se percibe como una advertencia a posibles amenazas.
- Vale la pena señalar que la mamba negra se distingue fácilmente de su pariente, la mamba verde, debido a su coloración y la ausencia de cualquier pigmentación verde en sus escamas.
Distribución y hábitat de la mamba negra
Este reptil se encuentra principalmente en las regiones sur y este de África, incluyendo países como Sudáfrica, Mozambique, Zimbabwe, Angola y Botswana. Dentro de estas áreas, habita una variedad de entornos que van desde bosques y sabanas hasta laderas rocosas y llanuras costeras.
Siendo una serpiente terrestre, la Mamba Negra a menudo busca refugio en huecos de árboles, grietas de rocas y hierba alta donde puede pasar desapercibida.
*La mamba negra no es nativa de España ni de Europa, por lo que está serpiente no se encuentra ni en España ni en Europa.
Veneno y letalidad de la mamba negra
El veneno de esta serpiente está compuesto por neurotoxinas, que afectan directamente al sistema nervioso. Una vez mordida, las víctimas experimentan síntomas como dolor severo, dificultad para respirar, parálisis y, en última instancia, fallo orgánico. Sin atención médica inmediata, una mordedura de esta serpiente puede ser mortal.
Es crucial entender que, a pesar de la alta toxicidad de su veneno, la mamba negra es una especie relativamente tímida y esquiva. La mayoría de los incidentes de mordeduras de serpiente que involucran a humanos ocurren debido a encuentros accidentales o cuando la serpiente se siente acorralada o amenazada.
Conservación de la mamba negra
Al igual que muchas otras especies de serpientes, este animal enfrenta importantes desafíos de conservación. La destrucción del hábitat, el cambio climático y la persecución humana representan graves amenazas para su supervivencia. Además, debido a su naturaleza tímida, a menudo son objeto de comercio ilegal de vida silvestre debido al alto valor asociado con su veneno.
Las organizaciones de conservación trabajan activamente para proteger este reptil y su hábitat. Sus esfuerzos incluyen crear conciencia, promover medidas contra la caza furtiva e implementar programas selectivos de cría en cautividad para reducir la dependencia de especímenes capturados en la naturaleza.